miércoles, 27 de marzo de 2013

¿Qué es el chisme o cotilleo?



Una palabra es suficiente para hacer o deshacer la fortuna de un hombre.
Sófocles


El chisme es la radio del Diablo. 
 George Harrison

Se me ocurrió reflexionar acerca de este tema, ya que viendo la televisión me di cuenta que la mayoría de las conversaciones o programas de entretenimiento, las personas invitadas comienzan sus discursos: “me dijeron que”, “yo creo que es”…. Y casi nunca muestran pruebas objetivas en relación a la afirmación que mencionan, allí comencé a preguntarme ¿Quién no ha sido víctima de algún cotilleo?, ¿Te acuerdas cuando has realizado un comentario no corroborado de una persona? quizás mucho de ustedes leyendo esto se comiencen acordar de algo…  
El cotilleo o Chisme es definido por el diccionario de la real académica española como una noticia verdadera o falsa, o comentario con que generalmente se pretende indisponer a unas personas con otras o se murmura de alguna. Es  también una actividad humana que consiste en hablar de alguien - tan bien como mal, aunque generalmente de forma desfavorable - sin que la persona en cuestión esté presente.”
También es definido como una forma de comunicación de dos o más personas,  sobre un evento reciente o un hecho, a menudo con un juicio negativo  y subjetivo. También, se podría incluir que tiene un tono de crítica, sarcasmo, y en algunas circunstancias, un sentimiento inconsciente de gratificación.
El chisme es lo contrario de una oración. Al orar o meditar, nos conectamos con un poder superior en busca de: tranquilidad,  esperanza, compasión,  redención, amor y paz. Cuando nos involucramos en un chisme, nos conectamos a una energía inferior, el cual fomenta malos pensamientos, negatividad,  ira y resentimiento.
Recuerda esta filosofía la próxima vez que oyes o quieres repetir un rumor.
En la Grecia antigua, Sócrates fue ampliamente alabado por su sabiduría. Un día el gran filósofo se encontró con un conocido que le dijo emocionado, "Sócrates, ¿sabe lo que acabo de escuchar acerca de uno de sus alumnos?"
"Un momento", le dijo Sócrates. "Antes de decírmelo, quisiera que pases una pequeña prueba. Se llama la Prueba de los Tres."
"¿Tres?"
"Como lo oyes." dice Sócrates. "Antes de que me cuentes algo sobre mi alumno, vamos a tomar un momento para poner a prueba lo que me vas a decir."
La primera prueba es la Verdad. ¿Has asegurado absolutamente que lo que me vas a decir es la verdad?"
"No," dice el hombre, "de hecho, solamente lo sé de oídas."
"De acuerdo" dice Sócrates. "Entonces no sabes si es verdad o no."
"Bueno, intentemos la siguiente prueba, la prueba de la Bondad. Lo que me vas a decir acerca de mi alumno, ¿es algo bueno?
"No, al contrario…"
"Entonces," dice Sócrates, "¿Estás dispuesto a decirme algo malo sobre él aunque no puedas asegurar que sea cierto?"
El hombre se encogió de hombros apenado.
Sócrates continuó, "Todavía podrías pasar, porque hay una tercera prueba, el filtro de la Utilidad. ¿Lo que me vas a decir sobre mi alumno me servirá?"
"No exactamente."
"Entonces," concluye Sócrates, "si lo que me vas a decir no es ni la verdad, ni bueno, ni tampoco de ninguna utilidad, ¿por qué quieres decírmelo?"
Derrotado y avergonzado, el hombre se fue.
Por esta razón Sócrates fue un filósofo tan grande y mereció tanto aprecio.


La única verdad es la realidad. Aristóteles

jueves, 14 de marzo de 2013

LA PACIENCIA



“Quien tiene paciencia, obtendrá lo que desea”. Benjamín Franklin.

La paciencia  es la actitud que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien. De acuerdo con la tradición filosófica, "es la constancia valerosa que se opone al mal, y a pesar de lo que sufra el hombre no se deja dominar por él". Además, Aristóteles en sus Éticas alude a esta virtud como equilibrio entre emociones extremas o punto medio: metriopatía. Con ella se consigue sobreponerse a las emociones fuertes generadas por las desgracias o aflicciones.

Tener paciencia actualmente, cuando existe un mundo globalizado e influenciado por las nuevas tecnologías, donde el tiempo es un bien preciado, ya que todo va muy rápido y sin digerir, la paciencia se hace un actitud poca desarrollada y a veces hasta no es utilizada, por lo tanto, cuando por algunas circunstancia de la vida, debemos utilizarla, allí nos damos cuenta que la “paciencia”, no es nuestra mejor actitud, ya que nos angustiamos y hasta nos invade los pensamientos pocos optimistas   para enfrentar algún cambio nada esperado.

La paciencia debe ser un actitud que debemos aprender a desarrollar, no solo para aquellos momentos inesperado o nada agradable, sino simplemente para dejarnos sorprender por la vida… a veces pienso que por la angustiosa ganas de tener todo aquello que queremos, desarrollamos la proactividad en su alta expresión, pero quizás no esperamos que debemos tener paciencia en algún momento de nuestra vida.